Los nietos son como herencias: tu los recibes sin merecer...
De repente caen del cielo... sin tener que pasar por las penas del amor, sin los compromisos del matrimonio, sin los dolores de la maternidad. Un nieto es realmente sangre de tu sangre. Con la edad llega la nostalgia ¿Dios mio, donde se fueron los chicos? se convirtieron en aquellos adultos que tienen ahora sus problemas, como nosotros los tuvimos...Son hombres y mujeres.
Y entonces, un día, sin que te impongan ninguna de las agonías de la gestación o del parto, un médico te coloca en los brazos un bebé. Completamente gratis.
Y lo raro es que todos te reconozcan el derecho de amarlo con locura.Tengo la seguridad de que la vida nos da nietos, para compensarnos de todas las pérdidas que acompañan a la vejez, son amores nuevos, profundos y felices, que vienen a ocupar aquel lugar vacío y nostálgico de otros tiempos más felices....
Mientras escribía estas lineas, se me llenaban los ojos de lágrimas, no solo por los nietos, que también,
sino de pensar por mis hijos que hace ya tiempo dejaron de ser mis niños...
sábado, 30 de marzo de 2019
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Dame tu opinión: