Hoy os voy a contar una bonita historia,que ocurrió en Santa Fe, ciudad de Nuevo México, hace ya 130 años.
Para los que crean en los milagros, y el que no crea ¡peor para el! pero también la puede leer...
Cuando se acabó de construir la Capela de Loretto, las hermanas que fueron a vivir, echaron en falta una escalera para subir al segundo piso.
Entonces pasaron 9 días rezando a San José, puesto que el había sido carpintero...
El último día, un desconocido llamó a la puerta, dijo que era carpintero y que podía construir la escalera. El construyó la escalera, sin ayuda de nadie.
La escalera es considerada un prodigio de carpintería: nadie sabe como se sostiene la escalera sin un soporte central. El carpintero no usó clavos ni pegamento para construir la escalera, y desapareció sin dejar ningún vestigio, ni cobrar su salario. (¡qué dirían hoy los sindicatos!)
A consecuencia de esto, una leyenda nació en la ciudad de Santa Fe, que creyó que el carpintero era el mismo San José, enviado por Jesús, para atender las súplicas de las hermanas. Desde entonces la escalera pasó a llamarse "milagrosa" y se transformó en un centro de peregrinación.
Hay tres misterios aquí, explica el portavoz de la capilla:
El segundo, es que arquitectos, ingenieros científicos dicen que no entienden como se equilibra la escalera.
Y el tercero, de donde vino la madera, después de hacer todo tipo de análisis no encontraron nada parecido en toda la región.
Un detalle: la escalera tiene justamente 33 peldaños, la edad de Cristo.
Hoy en día, que hay tanto incrédulo por ahí, (pero que si creen en Rappel, en el Horóscopo, en el Tarot u otros oráculos cualquiera) resulta una lección de fe, y de humildad, el ver que hay otras cosas que no podemos explicar, si no se contemplan desde un plano sobrenatural...
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